Cuando al fin nos encontramos, Paty me recibe con un afectuoso saludo y su sonrisa se me contagia. Es la primera vez que intercambiamos palabras, pero le comunico que ya he leído tres distintas entrevistas y visto un par de grabaciones sobre ella; sé su edad, Paty acaba de cumplir 59 años, sé que ama ejercitarse y también sé que hace poco tiempo recibió uno de los reconocimientos que más la llenan de orgullo: tiene el Récord Guinness como la mujer con mayor edad dentro del mundo profesional del boxeo, un premio que le valió mucho esfuerzo en un lugar donde la edad y el género siguen provocando escándalo si no sigues los estándares. “Me metí al récord para demostrar(les) que sí podía”.
Paty Trejo es una mujer llena de vitalidad, desde su infancia ha practicado distintos deportes, llegó a dar clases de aerobics y cuando tenía 40 años hasta formaba parte de una liga de fútbol “éramos campeonas, siempre trataba de hacer las cosas bien”.


Paty Trejo,La Leyenda, como fue nombrada en sus últimas peleas profesionales, sostiene una medalla del World Boxing Council en reconocimiento a su trayectoria y esfuerzo.

CDMX, 19 de marzo de 2024. Fotografías de Michelle León.

Sin embargo, su entrada al boxeo fue sorpresiva hasta para ella. Paty comenzó a boxear después de un trágico accidente doméstico que quemó gran parte de su cuerpo y la mantuvo en el hospital. El ver los cambios en su cuerpo y el alejarse de las actividades que amaba la encerró en una gran depresión, afortunadamente la preocupación de una amiga por su estado emocional hizo que la llevara de invitada a un gimnasio donde Paty terminó encontrando sus primeras clases de boxeo.
“Jamás pensé que fuera el boxeo el que me diera mi libertad como mujer, esa capacidad para decidir, para sentirme libre”.
Sin embargo después de sobreponerse al malestar y encontrar en el box un lugar para recuperarse, aún conversaciones pendientes con las de las personas que la rodeaban y no apoyaban del todo su nuevo interés.

Un deporte de jóvenes

Ella y su agente, Yani Colin, han trabajado juntas para organizar la agenda de la boxeadora estos últimos días, asistir a eventos y además ir a las grabaciones de un documental donde narrará su camino para obtener el Récord Guinness, la mañana fue larga pero Paty mantiene una sonrisa amable y una mirada serena.
¿Cómo estás, ya más acostumbrada a las cámaras?
Me comenta que no, aún le cuesta un poco hablar frente a ellas, dice que siempre fue un ama de casa educada en una cultura donde “te casas y no puedes expresarte porque causas problemas […] Siempre estuve dentro del deporte, pero a veces tenía que dejarlo para atender a mi esposo, tenía que atender mi casa”. Tanto era su cuidado con su familia que hasta dejó de dar clases de aerobics para no perturbar el espacio del hogar.
“Mi familia me decía: tuviste tu tiempo de soltera, ahora que elegiste casarte tienes que dedicarte de lleno a tu familia”.
Es difícil concentrarse en el deporte cuando se escuchan este tipo de palabras que reproducen estereotipos sobre la mujer, mismos que alimentan la significativa brecha entre hombres y mujeres que realizan ejercicio, según informes del 2022 En cuanto a la división por sexo, 49.5 % de los hombres y 35.6 % de las mujeres realizaron alguna actividad física. La brecha fue de 13.9 puntos porcentuales.

Ima. Der. Paty recibió de obsequio «El arte de curar quemaduras”,en su portada se encuentra un Fénix, ser mitológico que la identifica y que da nombre a su documental próximo a estrenarse.Ima Izq. Paty sostiene el Récord Guinness que la acredita como la boxeadora más longeva dentro del boxeo profesional.

CDMX, 19 de marzo de 2024. Fotografías de Michelle León.

Ima. Der. Paty recibió de obsequio «El arte de curar quemaduras”,en su portada se encuentra un Fénix, ser mitológico que la identifica y que da nombre a su documental próximo a estrenarse.Ima Izq. Paty sostiene el Récord Guinness que la acredita como la boxeadora más longeva dentro del boxeo profesional.
CDMX, 19 de marzo de 2024. Fotografías de Michelle León.
No tengo el placer de conocer al esposo de Paty o su familia, ella habla con alegría de todos y cómo su perspectiva sobre ella en el boxeo ha cambiado con el tiempo pero también reconoce con pesar que pudo existir un mayor apoyo hacia su nueva práctica en su momento, “nos dieron una educación muy machista, recuerdo que alguna vez (su esposo) me dijo: el box o yo” Paty se ríe y yo adivino la respuesta que sigue: “Mira mi amor, haz lo que tengas que hacer, pero el box no lo dejo… yo te apoyé mucho en su momento y hoy me toca a mí”.
Su familia ahora la apoyaba, pero otros boxeadores y sus sistemas de acreditación hicieron muy palpable que había algo específico en ella que les disgustaba: su edad. Cuando Paty subía al ring todos los insultos hacían alusión a su edad “Que se vaya a tejer, que se vaya a cuidar sus nietos”, pero a ella eso no la amedrentaba. “Siempre la edad: ya estás vieja; un mal golpe y vas a quedar mal; le vas a dar problemas a tu familia”, le decían. “¡Pero para eso entreno!”, contestaba, muy segura de sus habilidades y de sus metas.

El mundo del boxeo parecía cerrarse justo cuando sus sueños se iban haciendo más grandes. Era difícil conseguir peleas adecuadas para su peso y experiencia, pero a pesar de todo acreditó sus peleas y consiguió su reconocimiento, aún así cuando el Récord Guinness se dio a conocer, la gente la trataba como un fraude y lanzaba rumores en redes sociales. ”En un evento un campeón me dijo que no estaba de acuerdo con que yo tuviera el récord, que ellos tenían una carrera y que yo era una simple señora, una ama de casa no lo merecía”. Estas palabras no lograron callarla, Paty sabe y pudo comunicarle que todo esto que la rodea ahora, había nacido de su esfuerzo, sin palancas en las instituciones de boxeo, sin financiamiento, insistiendo ella misma en tener las peleas para continuar.
Con el tiempo Paty fue ganando amigos, ahora muchos jóvenes que en su momento no querían entrenar con ella toman como premio ser compañeros de sparring, ahora la buscan y respetan.

Cinturón que conmemora la entrada de La Leyenda al Récord Guinness. Homenaje de los Amigos de la Vieja y Nueva Guardia,organización de boxeadores, así como de la familia Almazán.

CDMX, 19 de marzo de 2024. Fotografías de Michelle León.

Paty, el boxeo femenino y un documental

No todas las personas intentaban detener los sueños de Paty, ella también recuerda y agradece a todas las compañeras boxeadoras que se atrevieron a tener un round con ella y así avalar su carrera profesional para conseguir el reconocimiento. Mujeres que como ella también han tenido que enfrentarse a distintas discriminaciones.
“Te das cuenta de las chicas que están dentro del boxeo tampoco se la ven fácil, si yo como adulta no me las vi fácil ellas tampoco, a veces si no hay palancas, si no hay una buena alimentación sólo te utilizan y te lastiman”.
Paty cuenta que en México, las peleas femeninas tienen criterios de selección muy cerrados: “Como mujeres nos limitan por nuestra complexión, aquí las chicas son de pesos chiquitos y deben de ser estéticas para que puedan pelear, eso es lo que yo he visto. Yo soy peso Welter o medio, los pesos de ese nivel no se manejan, no fluyen”, “A mí me intentaron bajar de peso pero sé que eso me hubiera afectado”. ¿Qué pasa con todas esas otras deportistas que al igual que Paty buscan avanzar dentro de su peso natural y enfrentarse a nuevas oponentes para crecer como boxeadoras?

Paty Trejo,boxeadora cuyo documental Fénix,La Leyenda ya se encuentra en posproducción.

CDMX, 19 de marzo de 2024. Fotografías de Michelle León.

Actualmente Paty ya no puede pelear, se lo prohíbe la comisión de box por su edad, pero aún hace peleas de exhibición y se encuentra filmando un documental que quiere inspirar a más mujeres a sobrepasar los límites impuestos por sus familias, por las instituciones como las del boxeo que son regidas por estereotipos y están cerradas a los cambios pero que ante la insistencia y exigencia de personas que aman el deporte como Patricia, han cedido y han atraído así nuevas miradas de apoyo. El documental aún se encuentra en posproducción y busca apoyo para ser proyectado, estoy segura de que lo encontrará muy pronto. Paty por su parte no ha dejado de entrenar y trabajar, en estos momentos también se encuentra en un proyecto donde buscan campeones de vida, es decir, niñas, niños y jóvenes que han luchado contra el cáncer y a los cuales quiere reconocer y regalarles un cinturón de box; ella sabe muy bien la importancia del bienestar emocional y de mantener vivos los sueños en épocas donde el cuerpo requiere apoyo. Le pido algunas palabras sólo para cerrar esta entrevista porque su historia parece seguir creciendo sin final.
“Como mujeres no hay que limitarnos, yo vendía PET con tal de tener para mi equipo, no nos rindamos, hay que darnos la oportunidad de probar lo que sea y que lo hagamos de corazón, si queremos cuidar a nuestros nietos ¡adelante!, pero si hay algo que quieran hacer muy independientemente de eso que lo hagan, no va ser fácil pero tampoco imposible. Tengo 59 años, yo sé en qué momento me voy a retirar, pero aún hay mucho que hacer”.